Un equipo de investigación de la Universidad de Sevilla, junto con el Instituto de la Grasa y la Universidad de Copenhague ha conseguido crear un método para evaluar la calidad del vinagre a través del olor. La utilización de la nariz humana como instrumento ha hecho que determinen qué olores y atributos deben estar presentes en un buen producto de este sector. Gracias a esos evaluadores podrán evaluar a cada uno de los productos de los fabricantes de vinagre.
Según explica Rocio Ríos, co-autora del estudio que ha llegado a este análisis, se han utilizado tanto técnicas analíticas como sensoriales para la realización de este proyecto. Las técnicas analíticas permiten identificar qué aromas están presentes en el vinagre. Una vez que se sabe cuáles son los compuestos, se agrupan por familias y se seleccionan los odorantes de impacto.
En cuanto a la parte sensorial hace necesaria que un investigador experto esté presente. Este debe catar los aromas que aparecen por una parte de la máquina, describiéndolos rápidamente. Diferenciará en cada compuesto a qué huele y con qué intensidad. El objetivo es establecer marcadores de calidad para analizar los distintos fabricantes de vinagre de Andalucía.
Empresas como Proartal afirman que es una buena medida ya que sus distintos tipos de vinagre pueden pasar por este tipo de análisis y verificar la calidad de una forma innovadora. De esta forma, también se podrían incluir en lso procesos de producción con el fin de poder mejorar las técnicas actuales y obtener un resultado final mucho más bueno. Los investigadores afirman que este método podría trasladarse a otros ámbitos de la alimentación, por lo que este descubrimiento es solo el principio.
proartalcalidad del vinagrecsicdeterminarencuentra una formaodorantes de impactoolor
Fuente original: Comunicae.es.